¿QUÉ ES EL HIFU Y CÓMO FUNCIONA?
HIFU (High-Intensity Focused Ultrasound) es una técnica no invasiva que utiliza ultrasonidos de alta intensidad para actuar en capas profundas de la piel, incluso en el SMAS, que es la zona donde trabajan los liftings quirúrgicos. Lo hace sin dañar la superficie.
El tratamiento provoca un calentamiento localizado en el tejido, lo que estimula un proceso natural de reparación. El cuerpo responde generando nuevo colágeno y elastina, dos proteínas esenciales para mantener la firmeza y elasticidad de la piel.
Es como darle al cuerpo un empujón para que active sus propios mecanismos de rejuvenecimiento. Todo de forma segura, sin agujas ni bisturí, y con un tiempo de recuperación mínimo.
BENEFICIOS DEL HIFU FACIAL
Reafirmación del tejido
El HIFU devuelve firmeza al rostro, al cuello y al escote. Es ideal para tratar la flacidez leve o moderada, sin necesidad de cirugía.
Mejora la estructura de la piel
Al estimular colágeno, las líneas de expresión y arrugas finas se reducen. La piel gana suavidad y se ve más lisa.
Estimulación de colágeno y elastina
El ultrasonido despierta la producción de estas fibras naturales. Gracias a ello, la piel recupera elasticidad y resistencia.
Los resultados empiezan a notarse a los pocos meses. Con el paso del tiempo, la mejoría se acentúa y la piel se ve más joven y tensa.
															
															HIFU CORPORAL: FIRMEZA EN ZONAS ESPECÍFICA
Reafirmación localizada
Se aplica en abdomen, brazos, muslos y glúteos. Perfecto para esas zonas donde la piel se relaja y cuesta mantenerla firme.
Sin cirugía y sin tiempos muertos
Todo ocurre sin cortes ni cicatrices. Tras la sesión, puedes seguir con tu día normal sin complicaciones.
Resultados progresivos y naturales
El cuerpo genera colágeno poco a poco. Esto permite que los cambios sean más discretos y adaptados, sin efectos artificiales.
¿CÓMO SE REALIZA UN TRATAMIENTO HIFU?
Quizá pienses que es una técnica muy complicada, pero realmente, es un procedimiento muy sencillo:
Se limpia y prepara la zona a tratar
Se aplica un gel conductor
El profesional pasa el cabezal de ultrasonido que lanza energía en puntos específicos
La sesión puede durar entre 30 y 90 minutos, según la zona
Al terminar, la piel puede notarse ligeramente sensible
Se sienten pequeños pinchazos de calor durante la sesión, pero no es doloroso. Es más bien una sensación de trabajo interno en la piel.
															
															QUÉ PUEDES ESPERAR DESPUÉS DEL TRATAMIENTO
El primer efecto es un ligero tensado inmediato. Sin embargo, los resultados reales aparecen a partir de los 2 o 3 meses, cuando el cuerpo ya ha generado nuevo colágeno.
La mejoría se prolonga hasta seis meses después del tratamiento. La piel se ve más firme, elástica y rejuvenecida, tanto en rostro como en cuerpo.
Hay que tener en cuenta que no es un sustituto del lifting quirúrgico. Funciona muy bien en casos de flacidez leve o moderada. Para casos más avanzados, se suele recomendar combinarlo con otros tratamientos.
¿QUIÉNES PUEDEN BENEFICIARSE DEL TRATAMIENTO HIFU?
Personas a partir de los 30 años que empiezan a notar flacidez.
Quienes buscan mejorar la textura y firmeza sin pasar por quirófano.
Pacientes que no quieren tiempos de recuperación largos.
Personas que buscan resultados progresivos y naturales.
El HIFU es seguro, eficaz y con respaldo clínico. Una alternativa real para quienes quieren rejuvenecer su piel sin cirugía.
Se ha convertido en uno de los tratamientos más demandados por su capacidad de reafirmar y mejorar la piel de forma natural. Estimula colágeno y elastina, mejora la textura y ayuda tanto en rostro como en cuerpo.
Si buscas una opción no invasiva, sin agujas ni bisturí, el HIFU puede ser la elección perfecta. Resultados naturales, progresivos y con el respaldo de una tecnología avanzada que cuida de tu piel desde dentro.
															
															
				
															

